Thomarie - mas alla

Thomarie: mas allá

Como cualquiera de los otros días de instituto, Marie, la joven mas hermosa que había en la secundaria, y a la vez la mas distraída, caminaba tarareando alegremente una canción que siempre había oído de su madre y de su padre, los cuales alegaban que alguna vez fue uno de los mas grandes éxitos de Danville, Marie lo hubiera dudado de no ser porque en el centro comercial de la ciudad siempre tocaban dicha música en el ascensor, de cualquier manera la letra le encantaba pero no sabía por qué, caminó hacia su casillero y se recargó en él mirando distraídamente el suelo hasta que alguien llegó frente a ella, levantó la mirada y sonrió dulcemente

-Hola Thomy –dijo ella alegremente- ¿Qué tal te ha ido en el examen de cálculo? –el joven de cabello oscuro de nombre Thomas le enseñó una hoja con una enorme A+

-si supongo que debí imaginármelo, en fin, Jazz hoy no nos puede acompañar porque debe ir después de clases a casa de una amiga con la que va a hacer deberes, así que supongo también que no tiene caso que sigamos aquí parados, a no ser que quieras crecer todavía mas –comentó para lanzar una risilla. Thomas tenía 16 años al igual que ella pero era mas alto, era también uno de los chicos mas populares del sitio ya que después de todo, ningún chico podía igualarle en cuanto a estatura, inteligencia y lo guapo que era, si, Thomas Fletcher Doofenshmirtz era la imagen de la perfección por decirlo de alguna manera, ambos muchachos salieron del instituto, Marie no dejaba de hablar y Thomas prefería guardar silencio, asentaba de vez en cuando pero no se alejaba de eso, pero hubo algo que hizo detenerse a ambos

-¡vamos, zoquete! –Decía un joven a un chico menor, tendría casi la misma edad que Thomas y Marie- entrégame tu teléfono, tu dinero y todo lo que lleves en cima

-Thomas, ¿qué haremos? –preguntó Marie al ver la situación delicada de delante, sin embargo pareció que esto alertó a los grandullones que estaban acosando al pobre muchacho, el cual tenía moretones en todo el cuerpo y algo de sangre saliéndole de la comisura de los labios, Thomas instintivamente se colocó frente a Marie mientras retrocedía un par de pasos con ella, no era temor, si no precaución, ya que al ser mas que ellos a Thomas le preocupaba más la seguridad de Marie que la suya propia

-pero miren que tenemos aquí –dijo el que sería el líder- Hola preciosa, ¿Qué hace una chica tan bonita por estos lares? Y más con un tonto como éste –Marie estaba fúrica ante el comentario pero Thomas se apegó mas a ella cubriéndola casi por completo con su cuerpo.

-no queremos problemas –Thomas sonaba entre la furia y la precaución, pues como dijimos antes él no temía por esos tipos, los hubiera enfrentado de estar solo, pero con Marie ahí, le preocupaba que le quisieran hacer daño, el sujeto rió sarcástico

-miren esto chicos –dijo el sujeto- el niño quiere convertirse en héroe… golpéenlo –ordenó rápidamente, los tres sujetos que le acompañaban se acercaron peligrosamente por tres ángulos a Thomas, Marie hubiera deseado hacer algo pero dentro de sí había como una especie de inseguridad que la atormentaba y le impedía moverse, Thomas reaccionó al primer golpe empujando a Marie hacia atrás para bloquearlo y responder con una patada con giro, los otros dos aprovecharon la distracción para poder atacar a Thomas, sin embargo este rápidamente pudo bloquearlos a ambos, pero el que había derribado antes le dio un golpe a traición en la espalda, Thomas lanzó un quejido y otro lo golpeó en el estómago

-¡Thomas! –exclamó Marie presa del pánico, Thomas recuperó como pudo el aliento y trataba de bloquearlos a todos y al ver venir un ataque de los tres se apoyó con las manos en los hombros de un par y saltó quedando suspendido en el aire de cabeza, Marie vio el movimiento y quedó impresionada al instante al igual que emocionada.

-¡tú puedes Thomas! –gritó animando a su medio-primo

-jamás vencerá a mis amigos de esa forma –el jefe había aprovechado para separarse de los otros y venir a por Marie, esta se giró poniendo un brazo a la altura de su pecho tratando de imponer una barrera entre ambos, el sujeto la agarró bruscamente de la muñeca haciendo que ella dé un quejido que Thomas al instante pudo oír

-¡Marie! –exclamó, la distracción le costó caro pues un par de sujetos lo golpearon haciéndole caer al suelo, Thomas llevó una mano al estómago que aun le dolía por el golpe anterior que recibió, le dieron un par de golpes más y el jefe chasqueó los dedos para que se detuvieran, Thomas abrió uno de sus ojos para ver con algo de rabia el jefe

-bueno, como ya ves, te dije que era un tonto –agregó burlonamente el jefe de la pandilla, Thomas se arrodilló con lago de esfuerzo

-¡Thomas! –exclamó Marie, estaba preocupada por él, las cosas iban mal y no sabían que hacer hasta que…

-¡oigan tarados! –Escucharon decir, todos se voltearon y Marie sonrió- ¿Qué le hacen a mis primos? –exclamó alguien, en efecto, eran Javier, Fred y con ellos iba Amanda que llevaba en los brazos unas bolsas.

-¿Qué les importa, enclenques? –respondió el jefe, los otros se lanzaron a atacar a los recién llegados pero estos como si fuera coreografía, se movieron con una ágil patada, después de unos minutos los tres pandilleros estaban golpeados y el cabecilla temblaba como un cobarde, salió huyendo al ver que tanto Javier como Fred le dirigieron una mirada ruda

-Thomas –dijo Marie para arrodillarse junto a él, le ayudó a lo menos poder arrodillarse

-no pasa nada, estoy bien –comentó Thomas levemente, el golpe le había afectado mas de lo que esperaba, le dificultaba el poder hablar

-gracias chicos, de no ser por ustedes, no sabría que hubiera pasado –agregó Marie

-siempre es un placer, vamos, ayudaremos a Thomas a que valla hasta la casa Flynn García Shapiro, el tío Ferb iba a venir a tratar unos asuntos con Tío Phineas –comentó Javier

-me parece bien –respondió Marie, entre Javier y Fred ayudaron a Thomas a que pueda caminar mientras Marie ayudaba a Amanda con las bolsas, cuando llegaron cual no sería la sorpresa de todos al ver el estado de Thomas y la expresión de Marie

-¡Thomas! –exclamó Phineas preocupado

-¿Qué te ha pasado hijo? –preguntó no menos angustiado Ferb

-nada… papá –contestó con algo de pesadez- lo de siempre

-pues esto no me parece lo de siempre, Thom –habló Vanessa

-vamos, llévenlo al cuarto de invitados –sugirió Isabella, pero esta vez quienes ayudaban a Thomas eran Phineas y Ferb, una vez arriba lo recostaron en la cama para que pueda descansar y atendieron las heridas que por suerte eran menores, pero Phineas se giró al oír un chirrido de la puerta, se asomó un cabello rojizo

-papá… ¿Thomy estará bien? –preguntó Marie, no entró ni se asomó en parte por la culpa

-en primera –dijo Thomas algo débil pero tratando de que le escuche- sabes que detesto que me llames Thomy, en segunda, esto no es nada –pareció que Marie se estremeció detrás de la puerta, Thomas lo notó al igual que los hermanos Flynn-Fletcher, ambos se pusieron de pie y Phineas dijo

-Thomas, lo bueno es que no son serias tus heridas -empezó Phineas

-pero –habló Ferb- quédate en cama

-me moriré del aburrimiento –repuso Thomas con algo de fastidio

-tranquilo, Marie te hará compañía –dijo, ambos se sobresaltaron al oír eso de Phineas, este caminó con Ferb fuera del sitio no sin antes hacer entrar (por no decir darle un leve empujón) a Marie, esta entró tímidamente y se sentó junto a Thomas, este pudo notar e interpretar por el mas mínimo movimiento que Marie estaba apenada por el hecho ocurrido

-Thomas yo… -Marie se atoró, no sabía ni que decir

-te repito que no fue nada –volvió a decir Thomas

-fue más de lo que imaginas, digo mírate, estás golpeado y es mi culpa –comentó cabizbaja Marie, a pesar de que se lo habían prohibido, Thomas se incorporó para quedar a la altura de Marie, le levantó el rostro para que lo mirara y agregó

-Marie, se supone que debo cuidarte, sin mí estoy seguro de que ya habrías volado el instituto entero en clase de química –bromeó Thomas, Marie solo esbozó una sonrisa

-siempre debes cuidarme… lamento que sea así y jamás poderte pagar –agregó Marie, para su sorpresa, Thomas se le acercó hasta rozarle los labios con los suyos y susurrarle suavemente

-pues –agregó- yo te daré una pista –y sin mas que decir la distancia entre ellos fue nula, , Thomas la había besado y Marie no se arrepentía de este hecho, aunque no sabían detrás de la puerta, oyendo todo estaban los hermanos Flynn-Fletcher

-creo que somos perversos por haberlos puesto en una situación incomoda –comentaba Phineas, Ferb se encogió de hombros.

-Pienso que no, si no lo hacíamos seguro que seguirían tonteando –agregó Ferb, ambos chocaron puños suavemente y bajaron las escaleras sin nada mas que decir, pero sobre todo sin interrumpir lo que dentro de la habitación ocurría